martes, 16 de febrero de 2021

La alucinante y desconocida historia de una hermandad de motoristas (Parte 2)

 

En Irlanda históricamente se han recogido y comido algas. Las mareas se retiraban y dejaban enormes cantidades de algas en las playas. Los irlandeses, ayudados por robustos caballos de carga, bajaban a las playas. Cogían aquel alimento gratis, no sometido al impuesto del señor feudal inglés, y lo transportaban a sus casas.

Y entonces llegó la Gran Hambruna.

La Gran Hambruna de Irlanda duró varios años, entre 1845 y 1852. Mató a un millón de irlandeses y obligó a emigrar (fundamentalmente a EEUU) a otro millón. Redujo la población de la isla en un 25%. La Gran Hambruna se debió sobre todo a un hongo que infectó las patatas. Base de la alimentación de muchos irlandeses.

La falta de patata y otros productos de huerta, hizo de las algas un bien muy valioso. Y que merecía la pena ser transportado por toda Irlanda. En cuanto apareció el transporte, aparecieron los robos y asaltos a los que transportaban…

Unos irlandeses que hacían el Camino de Santiago en los años de la Gran Hambruna, para pedir ayuda al santo, habían vuelto a su Galway natal con un maragato. Un descendiente del famoso maragato Cordero (Santiago Cordero, un legendario arriero) se había enamorado de una pelirroja irlandesa. Y tras casarse con ella en Santiago, la había acompañado hasta Irlanda. El asunto no deja de ser curioso por cuanto ni el maragato hablaba ingles ni la de Galway español, con lo cual hemos de pensar que se entendían en el universal lenguaje del amor.

El maragato establecido en Galway pronto tuvo noticia de los robos y asaltos a las diligencias con algas. Recordó entonces como había oído contar de siempre, en Astorga, como se creó y como funcionó la “Irman” (la hermandad). Con esfuerzos ímprobos y ayuda de gesticulación y señas, el maragato explicó a los irlandeses como se podían proteger los envíos. Un grupo de “bandidos”, historias de duendes y seres mitológicos de la tradición celta empezaron a correr de boca en boca por toda Irlanda.

Así, los pescadores de algas de Irlanda, protegieron sus envíos del mismo modo que los maragatos. Sólo cambiaron una cosa. En vez de “Irman”, el duro acento irlandés le cambió el nombre de forma que sonaba algo así como “Cherman”. Con los años, según el maragato fue aprendiendo la lengua mezcla de gaélico e inglés  de la costa oeste irlandesa, pudo explicar el significado correcto de “Irman”. Pero como ya se habían acostumbrado al nombre de “Cherman”, en vez de cambiar el nombre a Brotherhood (hermandad en inglés) pasó a llamarse la Cherman Brotherhood. Que con los años al dejar de ser fonética y tener que escribirla, se le dio el nombre de Sherman´s Brotherhood. Pero no adelantemos acontecimientos…

Inciso: Con la llegada, sobre 1920, de los Black and Tan del ejército británico para resolver la revuelta popular de Irlanda, el pueblo se organizó para formar un ejército al que llamaron IRA, siglas de Ejército Republicano Irlandés pero también acrónimo de IRMAN, en recuerdo de aquella primera lección de autodefensa que recibió el pueblo de Irlanda.

Llegamos pues al momento en que tenemos a la “Cherman Brotherhood” en Irlanda, después de importarla de la maragatería.

¿Cómo puede ser que se conservara la tradición de la hermandad? ¿Cómo se había mantenido su método de trabajo? ¿Cómo sobrevivió desde el siglo XV hasta llegar a Irlanda en el XIX?

Para eso tendremos que ver que pasó en América en los primeros dos siglos de su historia como Nuevo Mundo