No creo en la
democracia. Lo dije aquí, en este blog, hace un tiempo. Yo creo en la
aristocracia. Y un anónimo me pidió que algún día lo explicara. Lo de la
aristocracia. Así que ahora que tengo tiempo y mundo blog aún está en temporada
de verano voy a explicar en que aristocracia creo. Y por qué.
A nadie le
extraña que en la comunidad de propietarios de cada uno no se aplique la norma
de un hombre – un voto. No. En una comunidad de propietarios cada uno vota en
función de los metros cuadrados que tiene. Lógico, todo el mundo lo ve como
lógico y normal. Lo mismo en las asociaciones profesionales, los precios y la
calidad de votos suelen diferenciarse según seas estudiante, trabajador en
activo, jubilado, desempleado…Normal. A todo el mundo le parece normal.
Vale. Pues a mi
me parece normal que todos los votos no valgan lo mismo. No entiendo que los
votos sean iguales. Pondré un ejemplo: si hay que tomar una decisión económica
para mi no valen igual mi voto y el de Ramón Tamames. Estoy seguro de que Ramón
Tamames tiene una formación que haga que su opinión, en una cuestión económica,
valga como un millón de veces más que la mía.
Eso mismo se
puede aplicar al funcionamiento de las elecciones de un país. ¿Valen igual
todos los votos? Yo creo que no.
Por ejemplo,
estoy en contra de que voten todos los que tengan antecedentes penales. ¿Por
qué? Pues porque no respetan las normas. Así que no tienen derecho a opinar
sobre ellas. Otro requisito fundamental por ejemplo debería ser estar al
corriente de los pagos de impuestos. Si usted tiene cuentas pendientes con el
estado (Hacienda, Seguridad Social, tasas municipales, multas de tráfico…) no
puede votar. Por la misma lógica.
También creo
que es importante demostrar un mínimo de información sobre lo que se ha de
votar. Eso es fácil de conseguir. Se prohíben las campañas electorales, la
publicidad. Y el que quiera informarse
que acuda a donde está la información, las sedes de los partidos, los
programas… Si no tiene capacidad de informarse, no tiene capacidad para votar.
Queda claro que
sólo hablo de las cosas más sencillas de articular. Sigo pensando que todos los
votos no valen lo mismo, no tienen la misma calidad. Pero es difícil encontrar
un mecanismo que articule eso.
Pero ojo, sólo
he hablado de los requisitos de los votantes y la aristocracia no es eso. O no
es eso solamente. La aristocracia es el gobierno de unos pocos frente a la
democracia que es el gobierno del pueblo. El tema es como elegimos a esos pocos
y quienes son esos pocos.
Pues esos pocos
habrían de cumplir unos requisitos. No entiendo que cualquiera pueda ser
elegido para cualquier cosa. No. Para ser elegido habrías de cumplir los mismos
requisitos que para votar y además algún otro. Por ejemplo, demostrar al menos
5 años de experiencia profesional fuera de la Administración del Estado y además
firmar un compromiso por el que después de ocupar un cargo público no ibas a
tener relaciones en tu entorno laboral con dicha Administración. Hablar un
idioma extranjero con corrección sería otro requisito imprescindible. No sería
ninguna estupidez, exigir un mínimo de conocimientos. No tanto una titulación
determinada sino más bien un tipo de licencia, como el permiso de conducir o el
de armas. Que te obliguen a tener una formación mínima acreditada antes de
poder presentarte a cualquier elección. Que el que se quiera presentar a un
cargo electo, demuestre que sabe historia de España, que conoce el significado
de lo que es una Constitución, un Código Penal…
Estos son
requisitos muy básicos, algo que parece obvio. Lo sorprendente y a la vez
acojonante, es que con estos requisitos ya eliminarías a unos cuantos de los
actuales políticos. Eso da idea del nivel cutre que tenemos de trabajadores en
la política. Por supuesto, con el tiempo podríamos ir elevando el nivel de
exigencia. Pidiendo cada vez más requisitos.
Al final igual
conseguíamos que los políticos fueran gente competente…