Supongo que no os lo vais a creer pero os juro que es verdad y que está pasando. En mi empresa un iluminado decidió mandarnos a siete a un congreso que no nos apetecía nada ni nos valía para nada. Nos lo dijeron la semana pasada. A mí me tocaba jueves y viernes, que trataban los temas que presuntamente me importaban.
Pero me llamó el jefe y me dijo que a él le tocaba lunes y martes y que pasaba que por favor fuera en su lugar. Otro compañero me dijo que le cubriera el miércoles…a la vez yo el jueves me iba a ver a Patxi y le dije a otro que me cubriera… Cundio el pánico, la mala gana y la desidia en general respecto al congreso...
Consecuencia: Estamos apuntados siete a un congreso donde nunca vamos a estar más de dos (a 700 euracos la inscripción), por si fuera poco, al que le interesaba se puso malo el primer día y se lo está perdiendo.
Además pasamos de las comidas y cenas del congreso y nos estamos yendo de tapas por nuestra cuenta.
No ha habido nadie que vaya a la mitad de las sesiones. A todas ya ni soñarlo.
Ayer me aburría y me fui a casa.
Hoy he vuelto.
De hecho ayer sólo durmió uno en la ciudad del congreso… Nos estamos dejando una pasta en el AVE...
Los de la recepción del hotel alucinan con nuestros jaleos y las habitaciones vacías que pagamos para toda la semana…y con que todos los que estamos vayamos a dormir la siesta al Hotel…
Por si fuera poco, alguno ha venido dos o tres días y ni se ha pasado por el congreso. De hecho en mi habitación tengo las acreditaciones de dos y no me las han pedido…
Lo mejor es que nadie sabe quién hay en cada momento, nos vamos poniendo mensajes (estoy en el Hotel, estoy de cañas, estoy en el congreso…)
Es como lo de faltar a clase, pero a lo bestia y con cuarenta tacos. Nos estamos divirtiendo con la tontería…pero se va a enterar alguno y la liaremos.
Pero mientras tanto ahí seguimos (“te hacen unas cañas?””paso voy a dormir””¡si son las 12 de la mañana””pues por eso”)
Pero me llamó el jefe y me dijo que a él le tocaba lunes y martes y que pasaba que por favor fuera en su lugar. Otro compañero me dijo que le cubriera el miércoles…a la vez yo el jueves me iba a ver a Patxi y le dije a otro que me cubriera… Cundio el pánico, la mala gana y la desidia en general respecto al congreso...
Consecuencia: Estamos apuntados siete a un congreso donde nunca vamos a estar más de dos (a 700 euracos la inscripción), por si fuera poco, al que le interesaba se puso malo el primer día y se lo está perdiendo.
Además pasamos de las comidas y cenas del congreso y nos estamos yendo de tapas por nuestra cuenta.
No ha habido nadie que vaya a la mitad de las sesiones. A todas ya ni soñarlo.
Ayer me aburría y me fui a casa.
Hoy he vuelto.
De hecho ayer sólo durmió uno en la ciudad del congreso… Nos estamos dejando una pasta en el AVE...
Los de la recepción del hotel alucinan con nuestros jaleos y las habitaciones vacías que pagamos para toda la semana…y con que todos los que estamos vayamos a dormir la siesta al Hotel…
Por si fuera poco, alguno ha venido dos o tres días y ni se ha pasado por el congreso. De hecho en mi habitación tengo las acreditaciones de dos y no me las han pedido…
Lo mejor es que nadie sabe quién hay en cada momento, nos vamos poniendo mensajes (estoy en el Hotel, estoy de cañas, estoy en el congreso…)
Es como lo de faltar a clase, pero a lo bestia y con cuarenta tacos. Nos estamos divirtiendo con la tontería…pero se va a enterar alguno y la liaremos.
Pero mientras tanto ahí seguimos (“te hacen unas cañas?””paso voy a dormir””¡si son las 12 de la mañana””pues por eso”)