lunes, 15 de abril de 2019

Guía para trabajadores esforzados: cómo parecer más listo


Cómo a lo largo de mi vida he ido a miles de reuniones, he desarrollado una serie de normas para parecer muy listo en las reuniones. Porque además las reuniones van de eso. Seamos sinceros, con la tecnología actual, una reunión no tiene sentido, no hace falta. Las reuniones las convoca gente que no tiene nada que hacer o gente que quiere hacer un concurso, de a ver quien la tiene más larga y tal.
Por eso, para quedar bien y parecer listísimo, hay que saber una serie de trucos, estos:
1.- Dibuja un diagrama de Venn: O sea un circulo. Una pelota con unas cosas dentro y otra al lado con otras cosas, puedes ser creativo y hacer interesecciones, conjuntos vacios…vuelva a disfrutar de las matemáticas de cuando tenias 10 años. A la gente le parece super inteligente. ¿Por qué? Ni idea. Pruébalo.
2.- Transforma todas las fracciones en porcentajes y a la inversa: Es decir si alguien dice “en uno de cada cuatro casos…” tu dices remarcándolo y despacito: “o sea, un 25%...” y miras a todo el mundo con los ojos muy abiertos. La peña flipa.
3.-Volver atrás: Cuando alguien diga algo que parece importante, apréndete esa frase, y a los tres o cuatro minutos di: “un momento, volvamos a lo que has dicho antes” y repites su frase. Esto hace que todo el mundo se ponga nervioso y empiece a aportar ideas estúpidas.
4.-Toma apuntes: Llévate una libreta y útil de escribir a cualquier reunión, no vale nada electrónico. A mano. En cuanto alguien empiece a hablar, ponte a tomar notas. Seguramente lo que diga no vale una mierda y no tiene el menor interés, tu sigue escribiendo. Si no sabes que escribir, haz una entrada para el blog. O anota una palabra de cada frase que diga… Mola mucho llevar un cuaderno de anillas de toda la vida, un bloc, nada de folios sueltos. Y escribir con lápiz, ya es para nivel pro.
Bonus track: Si te fijas, en poco tiempo cuando tu empiezas a escribir, el resto de la peña también. Si dejas de escribir, al rato el resto de la peña también. Entonces vuelve a escribir. Siempre tardan más en dejar de escribir que en volver después de que tu vuelvas. Debe ser algo de termodinámica…
5.-Repite los tecnicismos: Cuando alguien dice algo muy técnico o muy sofisticado, apréndetelo bien. Y justo cuando acabe dile: “déjame repetir lo que has dicho…” y lo vas diciendo despacito, sacando las palabras una a una. A la gente le parece que lo estas deduciendo y entendiendo tu sólo. Es un truco que va especialmente bien si están explicando algo los ingenieros.
6.- Cambia la escala. O el paradigma: Cuando una explicación sea especialmente aburrida e incluso aprenderse una frase para aplicar el punto anterior parezca un trabajo de titanes, cambia la escala. Es decir, no hagas nada pero molesta. Por ejemplo, si hay una explicación de ingeniería pregunta ¿esto funciona en cualquier ambiente?, es una gilipollez, no tiene sentido, pero cuela. Si la explicación es de marketing o de ventas, haz lo equivalente ¿estos previsiones son con la financiación que damos a los clientes hoy?. Pues claro gilipollas, con cuales van a ser. Esa sería la respuesta lógica, pero sorprendentemente, preguntas eso y a todo el mundo le pareces muy listo.
7.- Levántate y anda: Si, como Lázaro pero sin ser un zombi. Simplemente ponte de pie, sigue mirando al que habla y vete unos pasos hacia un lado y hacia otro, con cara de atención. Incluso puedes ponerte una mano en la espalda y arquearte un poco como si tuvieras un dolor ahí de tanto trabajar. Es un truco muy efectista y a la vez viene muy bien cuando te estás durmiendo.
8.- Interfiere el Power Point: Si hay presentación con diapositivas, en algún momento pide que vuelvan una o dos diapositivas atrás. Automáticamente parece que estás atendiendo un montón y te explican todo mucho más profusamente. Si simplemente vuelven atrás y esperan pídele que te lo explique otra vez desde ahí. Les parece fenómeno y tu puedes seguir mirando si tus compañeras llevan braga o tanga, pervertido.
9.-Contesta el móvil: Si es una reunión importante, en un momento cualquiera atiende una llamada. La que sea, aunque sea de una teleoperadora. Simplemente, la gente asume que si atiendes la llamada siendo la reunión tan importante, es que debe ser más importante que la reunión… se que parece estúpido pero funciona. Suena el teléfono, miras la pantalla, pones cara de concentrado y dices “perdón” y sales fuera a hablar, te esperarán y además se creerán que llevas unas gestiones claves…
10.- Ríete de tu ignorancia: Pero en voz alta y haciendo comentarios sarcásticos sobre ti. La peña se creerá que eres lo más. Suelta frases como “si yo fuera capaz de entender esto, sería director general”, “el día que haga eso como tu, me forro”. Tus compañeros se quedarán admiradísimos, porque para entonces ya piensan que eres el más listo de la habitación, ahora descubren que también eres sincero. Y modesto.
De nada por la información.
Esperemos que no lea esto demasiada gente, quede como un secreto entre vosotros mis pocos lectores y yo. De otra forma las reuniones, con cinco o diez personas aplicando todos estos puntos iban a ser un descojono. Tres de pie, dos repitiendo despacio, uno haciendo un diagrama y otro pidiendo volver atrás…Igual hasta era divertido…