lunes, 13 de mayo de 2019

Mi navegador Marta y yo

Yo tenía una experiencia con el navegador del coche no demasiado buena. No me gustaba. Me molaba más ir con la brújula y los mapas. Pero en un cambio de coche o limpieza o lo que sea, tiré gran parte de mis mapas. Por si fuera poco, me enteré que los últimos navegadores permiten llevar un teléfono acoplado y así puedes llevar dos, uno al coche con la música y otro al navegador con las llamadas... total, que acepte que en algún evento me regalaran un navegador.
El navegador está muy bien para ciudades, pero es muy discutible su utilidad en carreteras. Lo primero es que no tiene un botón donde le puedas decir que paras a tomar un café o a mear o a echar gasolina, en cuanto te sales de la ruta, Marta se pone hecha un basilisco.
Porque mi navegador lo llevo con la voz de Marta. Y hablo con Marta. Cuando me dice: "dentro de 900 m en la rotonda tome la tercera salida" le contesto:
-"Pero vamos a ver, Marta de los cojones, cuanto son 900m, yo no se calcular 900 m a ojo"
Y así, los viajes charlando con Marta son de lo más entretenido.
Alguna vez también me las devuelve. Estando en Tordesillas le pedí volver a Vetusta por el camino más corto...Y la hijadeputa me hizo cruzar todo Valladolid, porque efectivamente es más corto cruzar la ciudad que circunvalarla...en metros aunque no más corto en tiempo...
A veces se pone de morros. Cuando decido volver por una carretera más bonita o con menos tráfico, o menos directa pero que me gusta más... empieza a llamarme de todo y la tengo que silenciar, y pasamos el viaje en silencio sin hablarnos.
Lo malo fue lo de los Whatsapp. Además de sincronizar el teléfono para los mapas y llamadas, le deje que me leyera los Whatsapps que es una cosa muy útil. Te va leyendo lo que te mandan y puedes contestar por voz.
Un día conté en casa lo bien que me lo pasaba charlando con Marta y que me leía los Whatsapp. Me miraron raro... a los dos días de contarlo, iba de viaje y de repente Marta dice: "Oye Gonzalo dice tu mujer que estas casado y que tu relación conmigo le mosquea y que además seguro que vas por ahí mirando a otras...". Os juro que por unas décimas de segundo tuve un escalofrío. Era la cabrona de La Parienta que se había entretenido en escribir un mensaje para que sonara absolutamente real...muy graciosa.
Otro día, que íbamos de viaje los cuatro, Marta empezó a decir:
-Mensaje de amigotes foto irrepoducible
-Joder que buena está. Manda más
-Mensaje de amigotes irreproducible
-Vídeo de amigotes irreproducible.
En fin... no era lo más adecuado, porque a La Parienta no le gustan los envíos de mis amigotes. Pero los cabrones de mis hijos también iban en el coche y de repente Marta empieza a escupir como una ametralladora:
-Oye papá eres un poco salidillo que lo que te mandan son tetas seguro
-Papá ¿si ya me teníais a mi, porque luego tuvisteis a la pesada esta?
-Creo que como familia, deberíais replantearos la hora de llegada de vuestros hijos
-Ya basta de acelgas queremos macarrones
Así que tuve que apagar a Marta entre el cachondeo de mi familia.
Ahora sólo nos relacionamos en secreto, sin nadie delante.

3 comentarios:

  1. Gracias por volver, eres único

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  2. El otro día un actor contaba que él pone la voz de Chiquito a los navegadores.
    Yo los metros si los sé calcular a ojo pero me supera cuando me dice gire por la calle Tal.¿Debo tener el callejero de todas las ciudades del mundo en la cabeza?.
    Todavía no he tirado los mapas del coche.

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  3. Hombre...no hay color, entre cruzar Valladolid y disfrutar de mi bella ciudad o recorrer la VA30, que poco agradecido ;-)

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